Lecciones de 2025: transformación digital y firmas electrónicas
El 2025 no fue simplemente un año de adopción tecnológica; fue el momento en que la digitalización dejó de ser una aspiración para convertirse en la práctica cotidiana de millones de empresas. Ya no se trataba solo de firmar documentos en línea, sino de repensar cómo construir relaciones más ágiles, seguras y confiables en entornos totalmente remotos.
En este proceso, la firma electrónica —potenciada por plataformas como Keynua— demostró que su valor no reside únicamente en la validación documental, sino en su capacidad para transformar procesos, generar transparencia y fortalecer la cultura organizacional en un entorno digital.